El 1 de marzo, en el marco de la marcha nacional
contra la megaminería impulsada por las asambleas ciudadanas de La Rioja, más de 1000
manifestantes se movilizaron al Palacio Municipal. Allí se dio lectura a un
documento, fragmentos del cual reproducimos a continuación:
“Tanto la lucha contra la megaminería como la del
dragado, representan una reivindicación popular fundamental: la defensa de
nuestro medio ambiente y, por lo tanto, de nuestra propia vida, y la
reivindicación de nuestro derecho a la autodeterminación, contra los intereses
minoritarios de los monopolios mineros y petroleros, quienes se valen de la
explotación desmedida y destructiva de nuestro entorno, de la explotación
laboral vía tercerizaciones y de la política de las autoridades locales,
provinciales y nacionales, que permiten el saqueo. …
“Venimos
además a repudiar el accionar represivo sufrido por los compañeros de
Tinogasta, Belén, Andalgalá y de otros movimientos populares que se han plantado
ante los monopolios mineros, para anteponer la defensa de la vida y del medio
ambiente. Algunos de estos compañeros han recibido imputaciones basadas en la
reciente “Ley Antiterrorista” impulsada por el gobierno nacional, una ley
anti-popular que persigue a quienes toman el compromiso de defender los bienes
naturales comunes y que debe ser derogada de manera inmediata, junto con la
desarticulación de las herramientas de persecución utilizadas por el gobierno,
como el Proyecto X. …
“Queremos también extender nuestra solidaridad y
reconocimiento a los trabajadores del frigorífico Villa Olga, quienes están
tomando su sede, reclamando una respuesta que defienda sus puestos de trabajo.
Denunciamos cualquier forma de precarización laboral, y advertimos que el
“progreso” que pretende traer el proyecto de dragado y de creación de un nuevo
polo industrial está lejos de atender la falta de trabajo en Cerri y Bahia
Blanca. ¿Cómo se explica si no que Bahía Blanca sea la ciudad con mayor
desocupación de la provincia, considerando la magnitud de los emprendimientos
industriales que ya existen?.”
Es la
segunda manifestación masiva en Bahía Blanca en el transcurso de un mes
recorrido por una nutrida agenda de actividades contra el dragado en Cerri (ver
PO 1203, 1205 y 1211). Además de Repsol, la Unión Industrial
y el Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, y sus representantes
políticos, detrás de este negociado estaría también el “empresario K” concesionario
de trenes y colectivos Cirigliano, ligado al transporte de gas licuado que se
procesaría en la planta regasificadora que es mascarón de proa del proyecto.
La alegre columna de una cuadra de largo marchó por
las calles del centro bahiense, recibiendo el apoyo de los transeúntes y
haciéndose más larga a medida que avanzaba en su camino hasta el teatro
municipal, donde el acto cerró con cánticos en defensa de la ría y contra el
gobierno “ni progresista ni popular… el que reprime por luchar”.
El OPDS, organismo provincial que debe decidir la
suerte del proyecto, con los plazos vencidos ha resuelto pedir ampliación de
informes a YPF, al CGPBB y a instituciones científicas locales. Es un recule frente
a la movilización popular en un cuadro de agravamiento de la crisis política
imperante. La estrategia del gobierno es el desgaste, pero el movimiento se
mantiene firme y, siguiendo el ejemplo de Famatina, le torcerá la mano al polo
industrial y a sus representantes políticos.
Juan Cappa
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