BAHÍA BLANCA: COVELIA SE EMBOLSA EL 11% DEL
PRESUPUESTO. EXPROPIACIÓN SIN INDEMNIZACIÓN MANTENIENDO EL CONVENIO CAMIONERO
PARA LOS TRABAJADORES
En Bahía la crisis de la recolección de
la basura está en un momento decisivo.
La recolectora Covelia llegó a la ciudad en
2008 de la mano del intendente Breitenstein (FPV), quien inmediatamente después
de ser reelecto en 2012 dejó la intendencia al concejal Bevilacqua para
integrarse al gabinete sciolista. Luego de cuatro años de cobrar altísimos
contratos al municipio, el ajuste que baja del gobierno nacional y los
realineamientos políticos surgidos de la crisis del PJ han hecho ver súbitamente
a Bevilacqua -devenido en ultraK- que el municipio paga carísimo un servicio
deficiente. El aumento exigido por Covelia a fines de 2011 es nada menos que
del 110%, y llevaría el canon de 48
a más de 100 millones de pesos anuales. En mayo la
comuna firmó un acuerdo precario por el 25% de aumento (llevando el contrato a
60 millones), con el compromiso de rever la situación en agosto.
Todo indica que Bevilacqua seguirá el
camino de los municipios de San Miguel, Esteban Echeverría y Quilmes, y
rescindirá el contrato con Covelia. Bevilacqua reconoció que en el encuentro
que mantuvo en julio con De Vido, éste le “comentó” la posibilidad de acceder a
determinadas líneas de crédito para adquirir maquinarias, en clara alusión a la
posible compra de camiones y municipalización del servicio. No obstante el
intendente K se encargó personalmente de negar las versiones de
municipalización. Aparentemente su plan es contratar a otra empresa privada,
posiblemente atravesando previamente un breve período de transición con una
sociedad con participación municipal. Esto incluiría pasar una parte importante
de los trabajadores del convenio camionero al municipal (60% del salario) o a
cooperativas truchas (25%).
Estamos ante la calma que precede a la
tormenta. En el comunicado en relación con el conflicto de Quilmes Pablo Moyano
dice que “los trabajadores marcharán
con los dirigentes a la cabeza, o con la cabeza de los dirigentes, aunque estos
sean políticos”. Pura cháchara. La verborragia de los Moyano es el taparrabos
del fracaso de su política de subordinación al gobierno, y deja al desnudo los
límites de una burocracia sindical en descomposición, con innumerables vínculos
con las patronales, su estado y sus partidos. En relación a la situación en
Bahía Blanca el sindicato de camioneros no abrió la boca hasta
ahora. Más que nunca está planteado el desafío de fusionar al movimiento
obrero con la izquierda revolucionaria, para darle una salida progresiva a la
crisis, que en la recolección de basura pasa por la municipalización del
servicio. Además la enorme sobrefacturación de estos años justifica la expropiación
de los camiones y máquinas sin indemnización, como una compensación parcial de
lo que se embolsó Covelia. Los trabajadores deben seguir bajo el convenio
camionero, ya que su tarea no se modifica por el hecho de evitar la onerosa y
parasitaria intermediación de las empresas privadas.
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